lunes, 24 de febrero de 2014

La Técnica del Golpe de Estado





Umberto Mazzei


ALAi AMLATINA, 24/02/2014.- “La locura individual es cosa rara, pero en grupos, partidos, naciones y épocas, es la norma”. Friedrich Nietzsche.

La Técnica del Golpe de Estado es el título de un libro de Curzio Malaparte, escrito en 1931, que, según dicen, Ernesto “Che” Guevara leía con avidez. Su idea fundamental es que el golpe de Estado es un problema técnico y no político. Malaparte pasa revista a los golpes de estado más famosos, algunos exitosos y otros fracasados.

El golpe de Bonaparte, el “18 brumario”, sería el primer Golpe de Estado moderno. Entre los golpes de la primera mitad del siglo XX, menciona el de Primo de Rivera en España, el de Pilsudsky en Polonia y otros más, pero resalta los golpes en que el objetivo golpista fue anunciado antes. El de Trotsky en Rusia y el de Mussolini en Italia.

El libro, publicado en Paris, fue prohibido en países con muy distinto tipo de gobierno: en Alemania, Austria, Bulgaria, España, Grecia, Hungría, Portugal, Polonia, Yugoslavia y otros. Los totalitarios lo prohibían por ser un manual para revoltosos; los democráticos, por lo mismo. Según el autor, el propósito era mostrar cómo se conquista un Estado moderno y cómo se le defiende, porque “la historia de los últimos años es […] de la lucha entre los defensores del principio de la libertad y la democracia, esto es, del estado parlamentario, contra sus adversarios”.

Malaparte afirma que es posible, en cualquier país democrático, dar un golpe de Estado, aún sin una situación crítica y sin el apoyo de masas. Basta un grupo que frene la maquinaria estatal y tome el poder sin confrontar la fuerza adversaria. En Rusia, el gobierno Kerensky protegió los órganos políticos, pero Trotsky ocupó los órganos técnicos. Luego intentó lo mismo, en 1920, contra Stalin, pero Stalin uso cuerpos especiales de defensa que obraban sobre el mismo plano técnico. En Italia, al gobierno lo defendían los sindicatos de Giolitti y la policía; los grupos fascistas neutralizaron ambos, tomaron el sistema ferroviario y fueron en trenes a Roma a sacar al gobierno de Luigi Facta. El rey, Victor Emmanuel III, con Roma en camisa negra, encargó a Benito Mussolini, la formación del gobierno y legalizó el golpe.

La estrategia es la de siempre: concentrar las fuerzas en el punto más sensible del adversario, que en un Estado moderno son los servicios públicos y los medios de comunicación.


Las debilidades del Estado moderno

El problema central del Estado moderno es la representación de la voluntad popular. Con los sistemas actuales de sufragio periódico, el elector delega su voluntad política con el voto y la soberanía popular se desplaza a sus representantes. En realidad, se desplaza a los partidos políticos, que suelen ser poco democráticos y por eso vemos perpetuarse las camarillas de los mismos en el poder, jugando a las sillas ministeriales.

Esa perversión existe por la pérdida del sentido comunitario, que es la base implícita de la representación; en su lugar ahora se consulta a masas desconectadas, amorfas, fáciles de manipular, como dice José Ortega y Gasset en La Rebelión de las Masas. La representación y la base social amorfa, promueven una clase de políticos profesionales que se constituye en una oligarquía que defiende por igual intereses propios o de particulares, en un clima de confusión irresponsable, como dice Alain de Benoit. Son gobiernos elegidos que no trabajan por los intereses de la gente y del país; son gobiernos de Partidocracia, como ya decían en los 60 Giuseppe Maranini, Georges Burdeau, Maurice Duverger y otros sociólogos políticos. La partidocracia siempre servirá intereses propios y no de esa mayoría que engatusa con cuentos ideológicos, slogans, promesas mentirosas y onerosos espectáculos de movilización.

En el Estado moderno, las telecomunicaciones son el principal instrumento para orientar esa opinión pública informe y llevarla hacía los objetivos que se desean, al punto de que se convirtieron en importante arma de guerra. Arma para la guerra cultural y psicológica, la de desinformación y propaganda; cuyo último frente operativo son Internet y las redes sociales.


Los golpes de Estado desde la Segunda Guerra Mundial

Antes de la Primera Guerra Mundial, la política imperialista de Gran Bretaña y Francia solía cambiar los gobiernos hostiles mediante intervención militar. Los Estados Unidos cultivaron siempre, sobre todo en América Latina, el golpe de Estado militar. A partir de la Segunda Guerra Mundial la técnica cambió y se comenzó a derrocar gobiernos elegidos por sufragio, organizando turbas que le dan al golpe un aspecto de rebelión popular. También se comienza a llamar al Golpe de Estado con el más aséptico término de Cambio de Régimen, porque se usa decir régimen a un gobierno que se eterniza en el poder sin celebrar elecciones.

Un golpe de Estado bien documentado, que muestra la evolución del progreso técnico es el de Irán, en agosto de 1952. Los datos los tomo del agudo y delicioso libro de Kart Meyer y Shareen Blair Brysac, titulado “Kingmakers, the invention of the modern Middle East”.

El fondo del asunto era, como ahora, el petróleo. El 15 de marzo, 1951, ante la negativa británica de aumentar la participación de Irán en la renta petrolera, el parlamento iraní (Majlis) nacionalizó la Anglo-Iranian Oil Company. El Shah Reza Pahlevi nombró primer ministro a Mohammad Mossadeq, promotor de la nacionalización y jefe del Frente Nacional. Los británicos amenazaron, movieron barcos de guerra, cerraron la refinería de Abadan, impusieron sanciones económicas, congelaron fondos iraníes en el exterior y decretaron un bloqueo petrolero. Como hace Estados Unidos ahora.

Los americanos no apoyaron a los ingleses y mandaron un agente, Kermit Roosevelt, a preparar el propio golpe, bajo el nombre de Operación AJAX. Los ingleses le dejaron una red de anglófilos y enemigos de Mossadeq, dirigida por los hermanos Rashidian, importadores de productos ingleses, que demostraron habilidad en organizar turbas callejeras. Bajo presión, el Shah intentó sin éxito destituir a Mossadeq, en julio de 1952. Para entonces ya existía una alianza entre la CIA y el M16 y la operación AJAX había sido aprobada en junio.

La CIA envió caricaturas de Mossadeq y afiches a Theran y empezó la campaña para desacreditar el gobierno de Mossadeq. Artículos sobre el peligro comunista en Irán fueron plantados en la prensa local e internacional. Se orquestó redes de inteligencia, se contrató agentes provocadores y especialistas en violencias que pudieran atribuirse a los comunistas. Se distribuyeron armas a las tribus. Se torturó y mató al Jefe de la Policía de Teherán. El Gran Ayatollah lanzo fatwhas (condenas) contra los comunistas.

El 25 de julio, Kermitt Roosevelt, bajo el nombre de James F. Lochridge, llegó a Teherán con $100.000 en billetes iraníes de baja denominación. Los americanos escogieron al General Fazlollah Zahedi para remplazar a Mossadeq. En parte por su conocida poca simpatía por los ingleses y su anticomunismo. Su hijo, Ardeshir había estudiado en EE UU y sirvió de enlace. El paso siguiente fue convencer a un Shah tembloroso –su alias en código era Boy Scout- de firmar un decreto nombrando a Zahedi primer ministro.

Mossadeq sabía que se preparaba un golpe y disolvió el Mahlis para impedir que la CIA obtuviera su destitución con sobornos. El Shah firmó los decretos nombrando a Zahedi y los envió a Mossadeq, pero Mossadeq, rodeado de tropas leales rehusó reconocer su autenticidad, mandó arrestar a Zahedi y radio Teherán denunció el intento de golpe. El Shah huyó a Roma.

Zahedi esperaba en las montañas. Roosevelt diseminó en la prensa internacional noticias de la sustitución de Mossadeq por Zahedi. La Embajada de EE UU imprimió millares de copias de los decretos y pagó agentes para su distribución. Turbas mercenarias ayudaban a militantes del partido comunista Tudeh a demoler estatuas del Shah. El 18 de agosto regreso de Suiza el Embajador norteamericano Loy Henderson y pidió a Mossadeq que enviase a casa a los partidarios suyos que manifestaban en las calles, porque de lo contrario evacuaría todos los residentes norteamericanos. Mossadeq cayó en la trampa y sacó a su gente de las calles.

El 19 de agosto los periódicos iraníes publicaron los decretos del Shah con el nombramiento de Zahedi. Tropas leales al Shah escoltaron a una turba organizada por los hermanos Rashidian. El modo era singular: armaron un espectáculo ambulante de circo que atraía gente, mientras tanto los actores gritaban consignas a favor del Shah y regalaban billetes de diez riales. En otros lugares grupos mercenarios armados de garrotes destrozaban las sedes del Frente Nacional y agentes de la CIA pegaban retratos del Shah en automóviles y muros.

En la tarde las turbas ocuparon el Ministerio de Relaciones Exteriores y la central de policía. Lo más importante fue la toma de la estación de radio y de la central de telégrafos –doctrina Malaparte- desde donde se vitoreaba el alzamiento y se exaltaba al Shah. Tanques Sherman rodearon la sede del gobierno de Mossadeq, que escapó por los techos. Al otro día Zahedi se presentó a bordo de un tanque en Radio Teherán y allí se proclamó Primer Ministro. El golpe costó la vida a cerca de trescientas personas, según el New York Times. Las turbas aclamaban a Zahedi, al Shah y gritaban “America Zindabad!” (Viva América).


Entre un trago y otro

En la segunda postguerra, las conspiraciones norteamericanas en el Cercano Oriente se tejían desde el Bar del Hotel Saint George, en Beirut; según memorias de agentes famosos, como Miles Copeland (The Game Player). El hilo conductor era el oleoducto transarábico (Tapline) que debía unir los pozos de la Aramco en Arabia Saudita con el Mediterráneo. Eso resultó en epidemia de golpes militares. En Siria, en 1949, hubo tres y otros en 1954 y 1970; en Egipto en 1952 y en 1956; en Irak en 1958. Con la crisis del Canal de Suez en 1956, Gran Bretaña quedó fuera del mundo árabe. Estados Unidos creó la Doctrina Eisenhower, que asistía a los árabes que resistieran la amistad del Egipto de Gamal Abdel Nasser o de la Unión Soviética.

Se brindó por golpes de Estado también en otras partes. En América Latina, los casos más notorios son: Arbenz en Guatemala, Perón en Argentina, Vargas en Brasil, Arosemena en Ecuador, Goulart en Brasil, Rojas Pinilla en Colombia, Bosch en Dominicana, Estenssoro en Bolivia, Allende en Chile, Bordaberry en Uruguay. En Asia, África y Europa también hubo víctimas: Congo, Corea del Sur, Vietnam del Sur, Grecia, Ghana, Indonesia, la lista es muy larga.


El modelo de masas y prensa: la “revolución de color”

La implosión de la Unión Soviética y el descrédito del marxismo leninismo, coincidieron con la revolución mundial de la informática y de Internet. La nueva tecnología ayuda a la creación rápida de textos e imágenes y su comunicación inmediata; es como hecha a la medida para difundir propaganda y el eje de la capacidad técnica y la difusión está en Estados Unidos. En esencia, se trata de movilizar masas, identificadas con un color, en la capital, para hacer huir a un gobierno débil. Si es un gobierno sólido, se crean pretextos ante la opinión pública mundial para una intervención militar, local o extranjera. Otro elemento complementario son las ONG y otros agentes, como Nacional Endowment for Democracy, Freedom House, Open Society Institute o USAID, que preparan ideológica y técnicamente cuadros que llevan a cabo el golpe y luego gobiernan para sus mandantes.

El primer golpe de masas y prensa se dio en Moscú, en 1993. Una campaña internacional de prensa convirtió al alcohólico de Boris Yeltsin, en un héroe que seguido de una turba y una compañía de tanques, bombardeó el parlamento ruso, recién elegido. Yeltsin nombró luego a Anatoly Chubais como Presidente de la Comisión de Propiedad Estatal, para vender, por centavos, las industrias del Estado a correligionarios y amigos, como la petrolera Yukos, que valía $70 millardos y la compró Mikhail Khodorkovsky, por $360 millones.

En 2002 se dio, en Venezuela, un efímero golpe de Estado cívico-militar, contra el Presidente Hugo Chávez. La oposición, demolida en las últimas elecciones, convocó a protestar. La multitud fue infiltrada por agentes provocadores para incitar una represión violenta. Ante la falta de represión, unos francotiradores mataron varios manifestantes. Fue el pretexto para que un grupo de militares arrestase al Presidente. Se formó un gobierno provisional, que cayó en dos días porque las guarniciones del interior no apoyaron y una multitud enardecida recorría el centro de Caracas, reclamando el regreso del Presidente Chávez.

En 2003, se dio la primera revolución de color, en Georgia, para sacar a Eduard Shevardnaze, último Canciller Soviético y Presidente de Georgia. Hubo elecciones el 2 de noviembre. El 22 los partidos derrotados convocaron a protestar frente al edificio donde el 23 debía reunirse el nuevo parlamento. Antes, el día 20, una emisora transmitió varias veces un documental sobre las protestas en Belgrado, en 2000, organizadas por Otpor, un grupo estudiantil, que sacaron a Slobodan Milosevic del poder. Días antes, gentes de Otpor dieron clases durante tres días sobre como tumbar un gobierno a más de mil estudiantes en Tibilisi. Los gastos fueron por cuenta del Open Society Institute, de George Soros. El 23, la policía custodiaba el Parlamento y grupos de activistas repartían miles de rosas a los manifestantes, un indicio de organización previa(1). Fue cuando Mihail Saakashvili, abogado georgiano de New York, entró sin oposición y tomó el Parlamento con un grupo de activistas. Hubo complicidad: Tedo Japaridze, jefe del Consejo Nacional de Seguridad con Shevardnadze, fue su Ministro de Relaciones Exteriores.

En noviembre del 2004 Viktor Yanukovysh ganó las elecciones en Ucrania. Su rival, Víctor Yushchenko, tenía el apoyo de los medios ucranianos. Después de su derrota, se repitió la operación de Georgia. Se acusó de fraude y una turba desfiló por las calles de Kiev, con banderas anaranjadas, regalando rosas: la revolución naranja. Los medios amplificaron el desorden y bajo presión internacional, la Corte Suprema anuló la elección anterior.


La Primavera Árabe

En 2011, las noticias sobre rebeliones en los países árabes tenían algo de hollywoodiano. La narrativa de la prensa era la misma. Gente joven se comunica por Internet, protestan en las plazas, combaten la policía, el tirano huye, la tiranía colapsa y se llama a elecciones. El villano era un personaje con décadas de poder y pocos meses de vida, que ya era hora de remplazar. Era la “revolución de jazmines”; versión árabe de las revoluciones coloreadas.

Hubo un par de villanos que no conocían su guion: los de Libia y Siria. Se inventaron hechos para narrar sobre manifestaciones pacíficas, que, agredidas, se convertían en rebelión armada que merecía apoyo humanitario, con bombas y misiles. La “obligación de proteger”, como dijo la Secretaria de Estado, Hillary Clinton. En Libia, en Benghazi, la rebelión fue armada desde el inicio y apadrinada por el francés Bernard-Henry Levy. En Siria, con elecciones poco antes, hubo una protesta en que manifestantes y policías fueron muertos por francotiradores. Ambos países fueron atacados por mercenarios salafistas financiados y armados por Qatar y Arabia Saudita y apoyados por la OTAN: una intervención extranjera disfrazada de guerra civil. En Libia, después de 6 meses de bombardeos, la OTAN triunfó y entregó el gobierno a Al-Qaeda & Cº y ahora rige el caos. Siria se salvó de las bombas de la OTAN gracias al desgano de Gran Bretaña, al veto ruso y chino en el Consejo de Seguridad y a 13 barcos de guerra de esos dos países protegiendo su costa.


Las revueltas actuales en Ucrania y Venezuela

Ucrania: Viktor Yanukovysh, el despojado en 2004, ganó las elecciones de 2010, sobre Yushchenko, que sacó 10% de los votos. La condena de Julia Timoshenko, que fuera Primer Ministro, por apropiación indebida, causó inquietud social. Ahora hay de nuevo protestas en Kiev. La narrativa de la prensa internacional sobre esas protestas dice que son por el rechazo del gobierno ucraniano a una oferta de asociación de la Unión Europea. Pero el texto del acuerdo no es público y además sería difícil leer y entender sus densas páginas legales. Por el nombre, Acuerdo de Asociación Económica, es el mismo acuerdo tipo que la UE firmó con América Central y ofrece a los países suramericanos y africanos.

En Ucrania, como en el Cercano Oriente, se busca exasperar y aprovechar las divisiones religiosas y culturales para cambiar gobiernos e imponer políticos propios: divide et impera. La fractura en Ucrania existe desde la Segunda Guerra Mundial. Stalin desplazó Polonia hacía el oeste, en tierras alemanas, pero expulsó la población alemana. Ucrania recibió tierras polacas al oeste, pero sin expulsar a los polacos. Por esa razón existe en Ucrania una minoría que habla polaco y es católica. Mientras la mayoría es ortodoxa y habla ruso. No olvidemos que Ucrania es el origen de Rusia. El pueblo vikingo de los Russ creó primero el Reino de Kiev y desde allí se expandió hacia el este y el sur, en lo que ahora es Rusia.

En Ucrania se quiere repetir la revolución naranja, pero con armas. En cualquier país sería inaceptable la activa y pública intervención de funcionarios europeos y norteamericanos azuzando las protestas. El objetivo de la intromisión es “cambio de régimen”, como dijo la Secretaria de Estado adjunta, Victoria Nuland, cuando admitió, en un encuentro del Nacional Press Club, patrocinado por Chevron, que los Estados Unidos han invertido 5 millardos fomentando la agitación en Ucrania. El nombre del títere que quiere imponer, Arseni Iatseniouk, afloró en una conversación suya con el embajador en Kiev, Geoffrey Pyatt, que fue interceptada.

En este momento las protestas ya son insurrección armada, contra una policía desarmada, por lo que ya van 105 policías heridos de bala y 35 muertos. Eso obligó al gobierno a equipar con armas la policía para que pueda defenderse. El gobierno ucraniano calcula que en el centro de Kiev hay unos 5 mil activistas extranjeros entrenados en desatar violencia. Muchos vienen desde Moldavia, según la prensa del Transdniester, otros de Polonia. Rusia debe apoyar con firmeza a Ucrania contra la ingerencia de países de la OTAN en los asuntos ucranianos.

Venezuela: El pasado 8 de diciembre tuvieron lugar en Venezuela elecciones para consejos municipales, de las que la oposición quiso hacer un referéndum sobre la contestada legitimidad del presidente Nicolás Maduro. La oposición (MUD) sacó un decepcionante 42,2% de los votos. Es inesperado que después de una elección desfavorable tan reciente, la oposición salga a las calles a pedir la renuncia del presidente.

Es cierto que en Venezuela hay muy graves problemas de seguridad, abastecimiento y solvencia fiscal que siguen sin resolverse. Es cierto que la permanencia en el gobierno de las mismas personas que no supieron resolverlos es mal augurio para una pronta y eficaz solución. Pero es cierto también que el gobierno tuvo una reciente confirmación de su respaldo electoral y su fuerza callejera.

Las protestas y movilizaciones de la oposición tienen un objetivo confesado por sus propios dirigentes: cambio de régimen. La constitución venezolana ofrece la posibilidad de hacer un referéndum revocatorio a mitad del ejercicio presidencial y se puede cambiar de régimen con impecable legalidad democrática. Se trata de un impaciente berrinche de los opositores -o de sus mandantes- que no quieren esperar la ocasión de hacerlo por la vía legal. Es siempre ilegal derrocar al gobierno elegido y el riesgo es ser acusado de causar muertes con disturbios fuera de lugar, amén de causar agotadoras pérdidas de tiempo y dinero.

La técnica utilizada es la de otros golpes recientes: una campaña de prensa con exageraciones, alimentada con mensajes sin verificar; siembra de mentiras en redes sociales; entrevistas selectivas en la prensa internacional; condena a la supuesta violencia por ciertos gobiernos; fotografías retocadas de protestas masivas, para efectos de propaganda. Todo dirigido a crear ante la opinión internacional un clima propicio para una intervención “humanitaria”. Por fortuna hasta ahora sólo hay nueve muertos, entre oposición, policía, chavistas y transeúntes. Con esa cifra, lamentable, pero baja, de víctimas, no es creíble la denuncia de represión salvaje, por quienes invocan la protección de los marines. Hay una indicativa inversión de estereotipos durante la tentativa de golpe. En las alcaldías socialistas hay normalidad y calma; en las de oposición liberal, reinan la agitación y el odio.


Conclusiones y precauciones

Las técnicas para golpes de Estado o cambio de régimen evolucionan. La informática y los medios de comunicación son hoy armas de guerra muy efectivas. Los países que quieran mantener su independencia deben crear y mantener alianzas con dominio técnico en ambos, para defender eficazmente la soberanía y los intereses nacionales o regionales. Hay también que crear equipos de gente con la capacidad cultural para captar los hechos importantes, entender su sentido y anticipar, capaz de analizar información en los principales idiomas, y transmitir en ellos mensajes convincentes. Se debe entrenar a periodistas, analistas y diplomáticos para que sean competentes, mundanos e interesantes. No todos los países independientes tienen la misma capacidad, por ello conviene aliarse y abrir los rangos a quienes pueden aportar mejoras a la eficiencia de la gestión.

Para evitar golpes de Estado por obra de minorías entrenadas, los gobiernos deben: a) tener respaldo de masas organizadas para neutralizar turbas mercenarias; b) mantener seguridad en los servicios públicos (electricidad, transporte, TV, radio, teléfonos, agua, etc.); c) tener medios para difundir la versión verdadera de la noticia; d) vigilar las actividades en el país de asociaciones extranjeras; f) vigilar el ingreso de fondos del exterior para grupos nacionales. Vis pacem, para bellum. Ginebra, 22/02/2014


Nota:
(1) http://www.worldpress.org/print_article.cfm?article_id=1805

- Umberto Mazzei es doctor en Ciencias Políticas de la Universidad de Florencia. Es Director del Instituto de Relaciones Económicas Internacionales en Ginebra. http://www.ventanaglobal.info

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Venezuela vs Chile-Colombia La lucha de clases en la Integración Regional






El pasado 28 y 29 de Enero se celebró en La Habana la II Cumbre de la CELAC. La presencia de la mayoría de los 33 mandatarios de Estados de América Latina y el Caribe, con la firma consensuada de un Documento Final con 83 propuestas, generó el imaginario internacional de “Integración y Unidad Latinoamericana”. Justamente la primera propuesta anuncia que: “Reiteramos que la unidad y la integración de nuestra región debe construirse gradualmente, con flexibilidad, con respeto al pluralismo, a la diversidad y al derecho soberano de cada uno de nuestros pueblos para escoger su forma de organización política y económica. Reiteramos que nuestra Comunidad se asienta en el respeto irrestricto a los Propósitos y Principios de la Carta de las Naciones Unidas y el Derecho Internacional, la solución pacífica de controversias, la prohibición del uso y de la amenaza del uso de la fuerza, el respeto a la autodeterminación, a la soberanía, la integridad territorial, la no injerencia en los asuntos internos de cada país…”.
La firma del Documento Final estuvo compuesta por 4 subgrupos abstractamente, los países de la Alianza del Pacífico (Chile, México, Perú y Colombia, con futuras adhesiones de Panamá y Costa Rica), los países del ALBA-TCP (Cuba, Nicaragua, Venezuela, Ecuador y Bolivia, además de las islas- Estado de Antigua y Barbuda, Dominica, Santa Lucia, y San Vicente y Las Granadinas), los Estados del MERCOSUR (Brasil, Argentina, Uruguay y Paraguay, siendo miembro también Venezuela por intereses geoestratégicos), y el CARICOM (15 Estados caribeños anglófonos).
Entre estos cuatro bloques, la principal dialéctica es entre el ALBA-TCP y la Alianza del Pacífico, buscando el primero una soberanía e independencia de América Latina para dejar de ser el Patio Trasero histórico de los Estados Unidos, fortaleciendo el desarrollo endógeno con amplia inversión pública en empresas mixtas Grannacionales y el comercio complementario para romper con la sumisión al dólar apoyando fuertes medidas proteccionistas posneoliberales. Mientras, contrariamente, la Alianza del Pacífico busca reactivar entre varios países de América Latina el proyecto neoliberal de los Tratados de Libre Comercio y la inversión privada. Hay que añadir que el caso del MERCOSUR es una línea intermedia que busca proteger según sus intereses mercantilistas y su desarrollo capital, liderado por la potencia regional de Brasil, pero sin perder las relaciones con Estados Unidos y con la globalización neoliberal.
Estos días, mediante un suceso, se ha visto en la balanza que la imagen de unidad y cohesión latinoamericana creada en la CELAC ha perdido peso frente a la pugna entre el ALBA-TCP, con apoyo del MERCOSUR y el CARICOM, y la Alianza del Pacífico. Ese suceso son los disturbios en Venezuela que deja, tras violentas protestas de la oposición política de extrema derecha que intenta deslegitimar el gobierno democrático de Nicolás Maduro, un saldo de 10 muertos1, y decenas de heridos, desde el 12 de febrero hasta el día 22. Una estrategia de “Golpe Suave” que según el politólogo Gene Sharp se conforma de 5 fases: generar clima de malestar económico con boicots empresariales (economía), denuncia de un supuesto totalitarismo del poder por parte de los medios de comunicación (comunicación), protestas violentas callejeras lideradas por la oposición (social), crear un clima social de ingobernabilidad y confusión donde incluso la misma oposición puede atacar clandestinamente a sus miembros en momentos de disturbios para generar impacto de represión gubernamental2 y aumentar más el desorden (política nacional), forzar la renuncia del Presidente mientras se alza una guerra interna con ayuda de servicios secretos de intereses imperiales como Estados Unidos y se prepara una intervención militar extranjera (política internacional)3 como “fuerzas de paz y orden”, con posibilidades de ser la OTAN. Justamente las mismas fases que se han llevado a cabo en Libia para derrocar a Gadafi o se ejecutan actualmente en Siria. Las denuncias del Golpe Suave no se han hecho esperar, y tanto el CARICOM, como UNASUR, el MERCOSUR, el ALBA y la CELAC, se han pronunciado al respecto en diferentes comunicados4, coincidiendo sobre la legitimidad del gobierno democrático de Venezuela y manifestando, algunos de ellos, la culpabilidad de la violencia a los grupos de derecha u oposición. ¿Y la Alianza del Pacífico?
La Alianza del Pacífico ha sido el único organismo regional que no ha publicado oficialmente ningún comunicado sobre la situación de Venezuela. Su silencio puede interpretarse como un arma de doble filo. Mientras los países integrantes oficiales del subregionalismo de la Alianza del Pacífico, Perú, México, Colombia y Chile, firmaron el comunicado de la CELAC como miembros que son, apoyando implícitamente el acuerdo de la Habana sobre el derecho soberano, la solución pacífica y la no injerencia, contradictoriamente algunos de estos países se pronunciaron a título individual contra el gobierno de Nicolás Maduro.
Justamente los casos más extremistas de oposición a la Revolución Bolivariana son Colombia y Chile. Estos dos países donde sus mandatarios, Santos5 y Piñera6, acogieron cada uno en una reunión oficial la visita del principal opositor de Maduro, Henrique Capriles, a sus respectivos países.
Caso Colombia
En el caso de Colombia, la cancillería del gobierno de Juan Manuel Santos hizo un comunicado de prensa donde en ningún momento denuncia el caos violento resaltando como causante a la oposición de la derecha venezolana, sino que, y escribiendo entre líneas, culpabiliza en cierta medida al gobierno cuando la oposición dispone actualmente de la posibilidad de usar los espacios democráticos: Instamos al Gobierno y a la oposición a que dialoguen, a que se sienten a dialogar, sin mirar para atrás, y para que pueda haber un mínimo de reconciliación política. Son estos los momentos de mantener mesura tanto, en el discurso como en las acciones políticas, y que las diferencias y las protestas, a las que todo el mundo tiene derecho, se expresen, pero sin recurrir a la violencia7”. Otro punto del comunicado es la afirmación que hace sobre que “Desde aquí, desde la Costa Caribe colombiana, queremos hacer un llamado a la calma, un llamado a establecer canales de comunicación entre las diferentes fuerzas políticas en Venezuela para garantizar la estabilidad del país y el respeto a las instituciones y a las libertades fundamentales”. Este mensaje acaba persiguiendo el fin de tener un impacto comunicativo para reflejar una falta de estabilidad política ayudada por el “llamado para que se respeten los derechos humanos de los colombianos residentes en Venezuela” al denunciar supuestas “recientes deportaciones de colombianos, compatriotas que han denunciado que han sido deportados sin justa causa”. Hay que recordar que Santos es la persona menos indicada para referirse a asuntos sobre la violencia interna o el respeto de los Derechos Humanos en Venezuela, tal y como señaló Maduro al reflejar que Juan Manuel Santos “ pretende venir a dar lecciones de democracia, cuando no ha hecho nada para defender los intereses del pueblo colombiano".
En primer lugar, Santos a inicios de 2012 rechazó toda medición de UNASUR en el conflicto armado de Colombia, que dura más de 50 años y que según el Grupo Memoria Histórica ha dejado más de 220.000 muertos, afirmando que eso es un conflicto interno y lo debe resolver Colombia sin recurrir a la intervención internacional8. A pesar, incluso, de violaciones de Derechos Humanos reconocidas por el mismo Presidente Santos9, UNASUR respetó el derecho soberano.
En segundo lugar, el Paro Nacional Agrario en Colombia, realizado entre agosto y septiembre de 2013 por protestas de campesinos contra el Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos que contempla la prohibición del uso de semillas nacionales a cambio de semillas norteamericanas, tuvo el resultado de 12 muertos, más de 400 heridos y 262 detenidos, cometiéndose grandes violaciones de los Derechos Humanos10. Un conflicto que en todo momento Venezuela respeto la soberanía nacional de Colombia y no se pronunció con un comunicado.
En tercer lugar, a nivel de relaciones interamericanas, el gobierno de Santos no aceptó el Fallo de la Corte de la Haya sobre el conflicto territorial y la delimitación marítima entre Colombia y Nicaragua11, retirándose posteriormente del Pacto de Bogotá que se firmó en 1948 para resolver conflictos continentales de manera pacífica mediante la Corte Internacional de Justicia12.
En definitiva, qué hubiese respondido Santos si la cancillería venezolana hubiese hecho un comunicado oficial sobre las violaciones de Derechos Humanos del gobierno colombiano, tanto en el conflicto armado como en el conflicto del Paro Nacional Agrario, o sobre la salida del Pacto de Bogotá. Una respuesta hipotética que no llegará a dato empírico dado que Venezuela respeta la soberanía de Colombia tal y como firmó como representante de la CELAC.
Caso Chile
Otro miembro de la Alianza del Pacífico que ha seguido la misma estrategia que Colombia sobre el contexto venezolano es Chile. Aunque hay que apuntar que la coyuntura política chilena difiere de la colombiana porque en el país austral las declaraciones han sido de un Presidente saliente, Sebastián Piñera, y no de la nueva Presidenta Michelle Bachelet que obtendrá sus funciones el próximo 12 de marzo. Por eso, a diferencia del choque manifiesto de Maduro con Santos, y como bien refleja la entrevista al embajador venezolano en Chile, Arévalo Méndez, quien afirmó que “El Presidente Maduro emitió un pronunciamiento sobre lo dicho por Piñera y para nosotros ya eso cerró, más sobresaltos nos causaron las declaraciones del Presidente Santos”, se ha pretendido disminuir el encontronazo con Chile.
Venezuela espera disponer y solidificar una buena relación diplomática con el nuevo gobierno de Bachelet, aunque también no hay que olvidarse del dato que en el nuevo gobierno de la Nueva Mayoría en Chile tiene un papel muy destacado dentro de la coalición el Partido de la Democracia Cristina (DC), el mismo que se ha posicionado a favor de los actos violentos de la oposición venezolana con palabras directas de uno de los líderes de la DC, Fuad Chachin13. Otro punto a tener en cuenta es un encuentro político que tuvo Bachelet con el líder opositor de los actos violentos en Venezuela, Leopoldo López (quien fue finalmente autoentregado y detenido14 posiblemente como una estrategia de mártir mediático), el pasado mes de julio15 en una reunión del Comité de Gobiernos Locales de la Internacional Socialista.
Piñera, a diferencia de Santos, no emitió un comunicado oficial sino que hizo declaraciones directas a los medios de comunicación sobre Venezuela, incluso más agresivas que Santos difiriendo con el embajador Méndez, afirmando que la forma de actuar en democracia es respetar las libertades, la libertad de expresión y los derechos humanos de todos los ciudadanos por parte del Gobierno, y respetar el Estado de Derecho y manifestándose en paz por parte de los ciudadanos"16. En definitiva acusó al gobierno de Maduro de violar los Derechos Humanos como acción de doble estrategia; una para poner a Venezuela en el punto de mira de diferentes instituciones internacionales, organismos y ONGs, que puedan entrometerse en asuntos internos y otra para hacer propaganda falsa en el pueblo chileno sobre la falta de libertades en Venezuela. Tras resaltar Maduro a Piñera de no meterse en asuntos internos de Venezuela, al igual que en no lo hace con Chile, con la intención de cerrar la pugna entre los mandatarios, Piñera retomó el ataque, para tener mayor impacto mediático y aprovechar el momento, sobre lo que sucede en Venezuela y su salida de mandatario, para difamar al gobierno venezolano y acusarlo de violar la Convención Americana de Derechos Humanos o Carta de San José17. Este ataque llegó a niveles de incoherencia y demagogia al acusar el mismo Piñera a Maduro de encarcelar a estudiantes y lideres de la oposición. Demagogia por ser Piñera uno de los Presidentes de América Latina que mayor represión ha ejercido contra estudiantes chilenos, entre otros aspectos de violación de Derechos Humanos, ejercicio de las fuerzas represivas que llevó incluso al nacimiento en 2011 de la imagen internacional de la líder estudiantil Camila Vallejo
En el caso de los estudiantes y sus marchas por la educación pública, poniendo en tela solo algunos de los ejemplos, en agosto de 2011 el gobierno de Piñera detuvo a 527 estudiantes18 o el 7 de octubre del mismo año fueron detenidos 130 estudiantes y decenas heridos19. Manifestaciones que muchas de ellas no fueron incluso autorizadas por el gobierno, violando así el derecho a la protesta20. Tal y como ha señalado la Presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (FECH), Melissa Sepúlveda, pidió a Piñera resolver los violaciones de DD HH y represión a estudiantes que su gobierno había cometido en Chile antes de pronunciarse sobre las manifestaciones en Venezuela21. Una afirmación que tiene detrás datos empíricos ya que el Informe Anual de la Universidad Diego Portales de Santiago de Chile en 201222 denunció las represiones, y con ello la violación del Estado de Derecho, a movilizaciones sociales como las estudiantiles, agregando discriminación contra los indígenas mapuches, y minorías sexuales. Justamente contra los mapuches el mismo gobierno de Piñera ha llegado a niveles de evaluación de Estado de Excepción en la región de la Araucanía23, aplicando la Ley Antiterrorista contra las comunidades y violando el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OI)
¿En qué momento las autoridades venezolanas hicieron intromisión en Chile denunciado oficialmente los altos niveles de represión en Chile por parte del gobierno de Piñera? Al igual que en Colombia, Venezuela tal y como se firmó en la II Cumbre de la CEPAL, ha respetado en todo momento el derecho soberano y la no injerencia.
Conclusión
En definitiva, los ataques de Colombia y Chile contra Venezuela reflejan la lucha de clases que se vive dentro de la integración regional latinoamericana. Se habla históricamente a nivel de clases sociales en relación a los medios de producción de una nación, dialécticamente clases trabajadoras y clases empresariales (oprimidos y opresores), pero no hay que olvidarse, como refleja la misma Teoría marxista de la Dependencia, las relaciones entre los llamados Estados desarrollados y subdesarrollados, una dicotomía que por un lado presenta a los imperios como Estados Unidos, y en el caso de América Latina, sus lacayos neoliberales como los países de la Alianza del Pacífico, y por otro los países que buscan niveles de desarrollo nacional con gestión endógeno y autónoma y elevada intervención pública dando pasos en la nueva fase histórica del posneoliberalismo. Una lucha de clases que se refleja a nivel macro en la disputa entre los proyectos políticos de izquierda y de derecha.
La diplomacia internacional, y en este caso Interamericana, está llena de complejidades y contradicciones en su estructura de poder dado el amplio abanico de actores estatales, pero Venezuela más allá de su proyecto nacionalista, latinoamericanista regional y bolivariano, no debe bajar la guardia de los enemigos que también existen en el continente más allá del Imperio de los Estados Unidos. La CELAC es un nuevo espacio de debate, apoyo y coordinación en varias políticas particulares, que hace frente a la OEA liderada por Estados Unidos y Canadá, pero mientras existan los países con proyectos neoliberales en América Latina no se consolidará un proyecto común en lo general. La Alianza de Clases a nivel de relaciones entre Estados debe estar presente como momento histórico que se irá superando en un plazo de tiempo corto-medio por si solo con la aceleración de las contradicciones regionales, mediante la crisis creciente financiera del capitalismo y el agotamiento de los recursos naturales como el petróleo. La Venezuela bolivariana debe estar preparada.
Notas:
1 Saldo hasta el sábado 22 de febrero, dado que la situación conflictiva continúa. 2 Según La Ministra de Comunicación la misma oposición planeó asesinar al opositor y líder de las movilizaciones violentas, Leopoldo López, para tener el impacto mediático de culpabilizar al gobierno de Maduro y generar un mayor conflicto político nacional que sumase una implicación extranjera de denuncia contra Maduro http://www.elmundo.com.ve/noticias/actualidad/noticias/delcy-rodriguez--alto-dirigente-opositor-planeaba-.aspx
3 http://actualidad.rt.com/actualidad/view/120340-psicologia-economia-armas-nuevos-golpes-estado
4 http://www.nodal.am/index.php/2014/02/unasur-mercosur-y-alba-repudian-la-violencia-promovida-por-la-oposicion-venezolana/
5 http://actualidad.rt.com/actualidad/view/95910-reunion-santos-capriles-plan-eeuu
6 http://www.telam.com.ar/notas/201307/25347-capriles-llego-a-chile-para-reunirse-con-el-presidente-pinera-pero-bachelet-descarto-recibirlo.html
7 http://www.cancilleria.gov.co/newsroom/news/palabras-del-presidente-colombia-juan-manuel-santos-calderon-relacion-la-situacion
8 http://www.caracol.com.co/noticias/actualidad/unasur-respetara-postura-del-gobierno-de-colombia-sobre-negociaciones-de-paz/20120131/nota/1615459.aspx
9 http://www.granma.cubaweb.cu/2013/07/26/interna/artic07.html
10 http://www.radiosantafe.com/2013/09/09/paro-agrario-dejo-12-muertos-485-heridos-y-4-desaparecidos-afirman-lideres-campesinos/
11 http://www.elnuevodiario.com.ni/nacionales/269833-colombia-rechaza-sentencia-de-cij
12 http://www.semana.com/nacion/articulo/santos-anuncio-retiro-colombia-del-pacto-bogota/268565-3
13 http://www.soychile.cl/Santiago/Politica/2014/02/16/231424/La-DC-solidariza-con-los-estudiantes-y-oposicion-venezolana.aspx
14 http://www.avn.info.ve/contenido/leopoldo-l%C3%B3pez-se-entrega-conminado-presidente-nicol%C3%A1s-maduro
15 http://www.latercera.com/noticia/nacional/2014/02/680-566162-9-la-desconocida-visita-del-opositor-venezolano.shtml
16 http://www.rpp.com.pe/2014-02-16-pinera-pide-respetar-libertades-y-estado-de-derecho-en-venezuela-noticia_670274.html
17 http://www.emol.com/noticias/nacional/2014/02/18/645577/pinera-responde-a-declaraciones-de-maduro.html
18 http://www.elmundo.es/america/2011/08/04/portada/1312478647.html
19 http://www.jornada.unam.mx/2011/10/07/mundo/024n1mun
20 http://www.educacionysociedad.org/detalle_n.php?id=MjY=
21 http://www.biobiochile.cl/2014/02/22/presidenta-fech-reacciona-a-dichos-de-pinera-acusando-represion-a-estudiantes-y-violacion-de-ddhh.shtml
22 http://www.derechoshumanos.udp.cl/informe-anual-2012/
23 http://www.eldinamo.cl/2013/01/06/gobierno-podria-decretar-estado-de-excepcion-en-la-araucania-por-conflicto-mapuche/

Fuente: Rebelion.Org 

Optimismo de voluntad e inteligencia, en defensa de la Revolución Bolivariana



Por: Del Rosario Ignacio Denis

“Los imperialistas descubrieron armas muy inteligentes; pero los revolucionarios descubrimos un arma más poderosa, ¡mucho más
 poderosa!: que el hombre piensa y siente”
Fidel Castro

El hombre y la mujer Venezolana a finales del siglo XX y comienzo del siglo XXI el Comandante Supremo Hugo Chávez los armo poderosamente de pensamiento y sentimiento amoroso a la vida, a la patria, con humildad, trabajo, constancia, paciencia, firmeza, expresándose en un apoyo popular con organización y movilización creciente.  En esta batalla que llevan catorce años de construcción nunca estuvo ausente la amenaza interna y externa en diferente forma, saliendo todas derrotadas en el intento por un comandante invicto que estuvo al frente de la operación para neutralizar y desarticular al enemigos internos y externos, siempre advertía que el Chávez pendejo ya paso en la historia aprendiendo de los intentos fallidos de esta misma derecha Venezolana, trabajó sin descanso para que no se cierre la puerta de la democracia y revoluciones pacifica característica única e inédita en nuestras América, el socialismo  del siglo XXI. Antes esta nueva arremetida y este resurgimiento del fascismo con orientaciones y etapas precisas del imperialismo norteamericano ejecutando un golpe de estado al presidente legítimo Nicolás Maduro con el mismo esquema denominado Golpe suave, sin subestimar el plan imperial, nuevamente saldrán derrotados.

El dilema que jamás entenderá la contrarrevolución es que la historia hacen los pueblos, no hay duda que el pueblo Venezolano en su mayoría decidieron por la vía del socialismo que todavía están inconcluso y así deberían ser, seguir garantizando la independencia nacional, plena soberanía energética, que sin duda aquí es donde más la garra imperial acechan pretendiendo utilizar cualquier vía.

Por otro lado Venezuela en este momento es casi imposible aislar en la región de los países vecinos y amigos en lo político, económico, institucional democrático a través de las manipulaciones mediáticas, utilizando prejuicio anticomunistas, libertad de expresión, violación de los derechos humanos, estos temas ya pasó en grandes debates y propuestas concreta abierta en los países del ALBA, UNASUR, MERCOSUR, CELAC, consolidando una nueva arquitectura institucional anti colonial, este es el otro dilema que cualquier tiranía imperial no va entender y mucho menos reconocer. 

En su Ensayo Nuestra América, publicado en 1891, José Martí señala: "Trincheras de ideas valen más que trincheras de piedras. No hay proa que taje una nube de ideas. Una idea enérgica, flameada a tiempo ante el mundo, para, como la bandera mística del juicio final, a un escuadrón de acorazados". La nueva historia renaciente de la región nuestra americana caribeña tiene fortaleza y cualidades que jamás se detendrán ante presiones mediática de medios nacionales e internacionales encabezado por CNN, igual a cualquier pretensiones de países con estados coloniales que quiere recurrir a instituciones trasnochada como la Organización de Estados Americano OEA; este tiempos históricos es un amanecer fecundo y tiene una identidad autentica de países con gobierno progresista y revolucionario con fuerza y apoyo popular creciente, por la vida y por un equilibrio económico, político, militar, social, cultural, ambiental y exigirán respeto y dignidad a cualquier imperio decadente, un sistema capitalista en crisis que sigue fundamentado en la obsesión por maximizar la ganancia. Carlos Marx ilustra esta voracidad del capital en el tomo I de su obra El Capital: “Al capital le horroriza la ausencia de beneficio.  Cuando siente un beneficio razonable se enorgullece. Al 20% se entusiasma. Al 50% es temerario. Al 100% arrasa con todas las leyes humanas y al 300% no se detiene ante ningún crimen, aunque enfrente el patíbulo”. Esta realidad es la esencia de la guerra económica en Venezuela en este momento y forma parte de la estrategia de presión por las medidas tomadas por el gobierno de Nicolás Maduro buscando proteger a la población de la voracidad parasitaria,  se creó la ley de control de precio justo, la creación del comercio exterior donde se priorizan el interés nacional, controlar el sistema cambiario, todas estas medida con propósito ético, político con propósito humanista, soberana, es la que generaron la arremetidas golpista contra el gobierno bolivariano, que siguen utilizando la violencia y el fascismo como técnica de acción política.  

Vamos pueblos y gobiernos nuestros americanos, la unidad cívico militar, la fuerza popular en la calle, con optimismo, inteligencia, lucha y organización, saldrán nuevamente victorioso por el camino de la paz, la justicia social, solidaridad, cualidades autenticas que nos hacen diferente de los planes imperialistas.  

“Los árboles se han de poner en fila para que no pase el gigante de las siete leguas! Es la hora del recuento y de la marcha unida y hemos de andar en cuadro apretado, como la plata en las raíces de los Andes”

José Martí

Del Rosario Ignacio Denis. Ingeniero Agroecologico graduado en Instituto Latinoamericano de Agroecologia Paulo Freire (IALA)

Twitter: @yiyoparaguay

Blog del Autor : http://ayvuguasu.blogspot.com/