Por: Del
Rosario Ignacio Denis
La enmienda de la ley de defensa solicitado por el nuevo
presidente Horacio Cartes al Congreso
y ya aprobado en la cámara de diputados por mayoría pasando al senado de manera apresurado con
fuerte respaldo de la cúpula de partido de derecha, liberales, colorados y algunos conservadores es planeada para imponer otra digtadura. La modificación de la Ley 1337 tiene una intenciones oscura y peligrosa para la sociedad Paraguaya y Latinoamericana busca nuevamente sustentar jurídicamente la doctrina de seguridad nacional, el plan patriota, es decir una alianza genuina del plan Colombia y la red intervencionista en la región financiado por el narcotráfico, venta ilegales de armas, una red que impone la violencia y la inseguridad como mecanismo de control territorial, geoestratégico.
Estas
red opera desde hace mucho tiempo en México, Guatemala, El salvador, Panamá, Costa
Rica, Honduras, Colombia y ahora en Paraguay con graves consecuencia de violación
de los derechos humanos de los mas excluidos campesinos, indígenas que de
manera forzosa van desplazando de su territorio pagando con sus vida personas
humilde y trabajador, este conflicto social es utilizados los gobiernos títeres
neoliberales para la intervención militar extranjera con apoyo nacionales,
incluidos mercenarios privados argumentando como responsable a lo que se oponen
a este proyecto, criminalizando, satanizando todas ideas progresista, sociales,
integracionista o revolucionarios, busca esconderse a través de la guerra mediática
de los grandes medio privados de manipulación de la información con respaldo de
mafia institucionales, jueces, fiscales, policía y militares escondiéndose como
causante y responsabilizando, reprimiendo, desapareciendo a los que sufren esta
consecuencia. 
De
acuerdo con esta enmienda a la ley de Defensa, las Fuerzas Armadas (FFAA) Paraguayas
puede actuar bajo órdenes de una sola persona es decir el ejecutivo nacional sustentar
y utilizar lo jurídico como aparato de dominación por encima de la sociedad
civil y otros poderes independiente del estado imponiendo la represión como
aparato y garantía de estabilidad y seguridad son practica política muy
conocida por la dictadura de Stroessner, apoyado por el imperio Norteamericano como
el Plan cóndor, utilizaba el Estado de Sitio, Ley N° 294: La Defensa de la
Democracia, del 17 de Octubre de 1955 Ley N° 209: de Defensa de la Paz Pública
y Libertad de las Personas, del 15 de setiembre de 1970, Stroessner no tenía
ninguna necesidad de reformar esta Constitución al tomar el poder, (1954), al
contrario, esta disposición sobre el Estado de Sitio, le venía de maravillas
para aplicarlo, y así lo hizo. Sin
embargo, le habría resultado insuficiente esta prescripción constitucional, por
lo que además de la vigencia del Estado de Sitio, logró que la Cámara de
Representantes constituida el 15 de Agosto de 1954, sancionara la Ley N° 294,
de la Defensa de la Democracia, sólo un año después, en Octubre de 1955. Con la
ley 294/55 Stroessner logra controlar a sus enemigos imaginarios y político desapareciendo
con la excusa del comunismo, triste historia que dejaron sus secuelas
culturales de miedo, terror a la sociedad paraguaya, no hay duda que hasta hoy
persiste y hoy intenta regenerase fácilmente con su careta de democracia
representativa. La ley, solicitada por el Presidente Paraguayo, Horacio Cartes, se considera una herramienta para hacer frente al grupo armado de izquierda denominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP) que opera en el norte del país muy perseguido supuestamente por los organismo de seguridad del estado con alto presupuestos e inversiones sin obtener ningún resultado, solo desplazamiento forzoso de comunidades rurales, persecución a las organizaciones sociales, atropello a familia humilde amedrentado niños, ancianos, creando un clima de terror e inestabilidad. Hoy solicitan una ley especial, un presupuesto multimillonario y apoyo de fuerzas extranjera de combate al terrorismo y narcotráfico, estos es para seguir alimentado y promoviendo la violencia, persecuciones, criminalidades, creando la condiciones a la mafia política, parapolitica, narcopolitica apoderar del territorio controlando desde la estructura del estado, generando una condición de anomia social, la ley de la mafia, chantaje, amenaza, atentado, secuestros es dirigidos, apoyados y financiado por estos grupos que tienen intereses territoriales en el país y geopolítico en la región.
El crimen organizado, la
violencia social, la inseguridad en Latinoamérica y el Caribe es resultado de
atropello territorial del gran capital que se reagrupa con su proyecto neoliberal
intervencionista. Es reflejo de la sociedad capitalista de control global
determina e impone un poder y se junta para defender sus interés, tierra, agua,
petróleo, minerales, fuerza de trabajo. Ellos buscan mantener el control de su política
excluyente imponiendo la criminalidad, es la dictadura, anomia social, que degrada,
debilita, excluye hasta las actitudes democráticas a una sociedad. La ley del más
fuerte, del más armado, del más organizado en la criminalidad y la violencia.
Es más importante estar un
segundo de pie pero comprender, decir y denunciar esta amenaza a toda la
sociedad paraguaya que seguir estando de rodilla sometido y confundido por unas
elite mafiosa, corrupta y criminal, la unidad en nuestras luchas es la única garantía
para defender la pluralidad, la democracia, la estabilidad en defensa de la
patria.
La patria es la Humanidad.
DEL ROSARIO IGNACIO DENIS: es ingeniero agroecológico, graduado en el Instituto Universitario Latinoamericano de Agroecología Paulo Freire
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